jueves, 14 de mayo de 2015

Fidelidad sin fronteras...

¡Buenas tardes mis queridos hermanos! Aquí pasando a dejarles esto, esperó sea de su agrado. Un saludo sincero y un gran abrazo. Gracias por estar aquí esta tarde. Sin más les dejo esto.



El campo estaba fundido como una lámpara que se apaga con la fuerte brisa de la tormenta, los pobladores hartos de la injusticia que les condenaba ser parte de las guerrillas incansables.

El rufián se veía lejano, pero estaba mas cerca de lo que se hubieran imaginado, el reino vecino jamás comenzó la pelea, pero esto fue algo que se conoció hasta el final.

Los niños lloraban con miedo perdiéndose entre los cabellos de sus madres, el hambre comenzaba a hacer presencia en las casitas y los jóvenes volvían con los cuerpos de sus padres para ser enterrados dignamente.

Pero, ¿qué pasaba en aquel lugar? Nadie podia entenderlo... ¿Nadie?... Si, había alguien que en momentos precisos antes de la batalla vio al rey salir una noche y encontrarse con una dama, la más importante del reino vecino, en amoríos ocultos, planearon acabar con el poder de sus respectivas parejas y gobernar todo los dos.

Nicandro, el anciano que descubrió todo, fue apresado y oculto, pero, una mañana el celador ansioso por escuchar la historia y después de entenderla, en fidelidad a su señora real, hizo llegar el mensaje a esta, la cual fue a ver al anciano y viendo que habia sido amigo de su abuelo lo liberó.

Esa misma tarde , lució sus mejores vestidos y, al llegar el rey al castillo lo espero en el comedor, al llegar este, le sirvieron ternero con salsa de moras frescas y tras haber degustado eso la reina se hizo acompañar del celador y del anciano y dijo:

Ya puedes ir bajando tu cetro y quitándote la corona, despidiendote de tu espada y tus privilegios, pues por tus acciones y decisiones, pronto tu Reina te desconocerá y con su ejercito de hierro y el de sus de recuerdos te desterrara de su corazón y de su reino...

Al escuchar esto el rey furioso tomo su espada y se abalanzó contra su esposa, con el fin de verla morir por su propia mano, el anciano presuroso se adelanto sobre la Reina diciendo con voz fuerte —por ti doy mi vida mi señora— y allí acabo sus días, el celador o movilizó al rey y 
Ella lloró amargamente la muerte del anciano.

Totalmente Chica Verde ^.^.


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