Ella.

La verdad es que no sabemos esas historias, no sabemos que pasa con esa chica de jeans azul y suéter rojo que llora por dentro en el bus, aguantando al borde las lagrimas mientras aprieta firmemente sus sentimientos, no sabemos que pasa en su mundo ni en su corazón, me ha inspirado de nuevo esa chica, al verla tiemblo pensando qué necesita, quisiera abrazarla, consolarla, secar sus lágrimas... Pero es fuerte, la miro, es una guerrera, me mira, quiere echarse a mis brazos y solo respira profundo y voltea a otro lugar, quizás debe ser así, quizás... 

Que incertidumbre me causa el verla sentada al lado de un extraño, estremeciéndose con cada nota musical del artista nacional que se presenta por primera vez tras varios años de ausencia, me impresiona su afán de disfrutar cada momento aunque lleve en su historia páginas tristes, desgarradoras y anhelantes de explotar en su corazón.

Que admirable que intente borrar cada día sus penas pasadas y se disponga a disfrutar la jornada social que la encierra en una lucha de pensamientos nuevos y conocidos que escuchar, una lucha entre el decir algo que cambie el universo de alguien más y el hecho de callarlo para no exponer su opinión que mas tarde será juzgada de arriba a abajo sin la necesidad de que fuere así.

Esa chica es especial, no tiene pretensiones más que dejar un poco de huella en el mundo que la rodea, dar felicidad a las personas de su vida y a su vida misma, regalar una sonrisa a cada silencio que tortura a los demás en la agonía de las preocupaciones que los invaden, pronunciar una palabra esperando sea la indicada, rechaza los prejuicios y sin embargo considera mejor conocer cada párrafo en la vida de los demás, analizar cada detalle que los conforma... 

Así va esta chica por la vida, anhelante de nuevos retos y enseñanzas , preguntándose si podría besar un sapo, espolvorear su vida con azúcar, tropezar en un tazón de sopa o incluso nadar en un vaso con jugo sabor limón, esta chica es diferente, quisiera ser parte de su mundo, atar sus agujetas o lazar su cabello con el listón rosa y lila que pone en él. Quisiera derramar mis emociones en su diario y ser al menos en una minúscula forma parte de sus pensamientos; quisiera poder capturar sus momentos, tomar su mano, besar su frente, dormir a su lado respetando su espacio y vigilar su mundo, quisiera cuidarla de los cretinos que invaden su corazón y la hacen llorar, quisiera meditar sus sueños y temblar en sus suspiros más profundos, me gustaría nadar en su vestido de seda, rozar su delicada fragancia y empaparme de su esencia, esa chica no es como ninguna otra, esta chica es ya parte de mi aunque no lo sepa, "amo y admiro a esta chica".

Totalmente Chica Verde ^.^